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> Permisos, alambrados y guardias armados

“Los Ayoreo-Totobiegosode han reclamado 550.000 hectáreas de sus tierras tradicionales en el departamento de Alto Paraguay en el Chaco desde 1993”, dice el documento de la USAID en su primer anexo. Mediante una resolución de 2001, ratificada por otra de 2009, solicitaron que esas tierras fueron declaradas “Patrimonio Natural y Cultural Tangible e Intangible Ayoreo y Totobiegosode” e integradas a la Reserva de Biósfera Chaco Paraguayo.

Sin embargo, sólo tienen títulos formales sobre 120.000 hectáreas y acusan al INDI (Instituto Paraguayo del Indígena) de estar vendiendo las tierras a inversionistas privados.

De hecho, “la gran mayoría de las tierras reclamadas por los Ayoreo-Totobiegosode y reconocidas por el gobierno están bajo control privado, incluidos grandes establecimientos ganaderos de propiedad extranjera” y la Secretaría del Ambiente “ha emitido permisos ambientales para la producción pecuaria, la silvicultura y la prospección petrolera en las tierras reclamadas”, refiere la USAID.

Como resultado, miembros de la comunidad se han visto obligados a abandonar el bosque y, más recientemente, “nuevos alambrados y una creciente presencia de guardias armados que custodian los establecimientos ganaderos privados está restringiendo su acceso a recursos tradicionales y lugares de importancia cultural”.

“Miembros de la comunidad manifestaron tener pocas esperanzas en que el Gobierno de Paraguay actúe en favor de sus intereses sin presión externa”, concluye el texto del anexo.

 

Publicado el 16-08-2018

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