Close
PLAZA LOGÍSTICA

Con la mira en el largo plazo

La decisión de encarar inversiones que vayan más allá del ciclo es el activo más fuerte de cara a clientes y accionistas, dice su gerente general. Cuentan con tres parques premium, uno de ellos en construcción bajo normas Leed.

 

Por Roberto A. Pagura

Plaza Logística es una empresa de capitales estadounidenses y argentinos dedicada a la provisión de infraestructura logística e industrial. Cuenta con tres parques logísticos multicliente, uno de ellos en construcción, que operan bajo los máximos estándares de calidad, es decir, en el segmento conocido como premium o triple A. Su irrupción en el mercado es relativamente reciente, pero el plan de negocios apuesta al muy largo plazo, incluso para los parámetros locales. “En la Argentina, hay una oportunidad para inversiones que vayan más allá del ciclo. Desde el primer día, dijimos que no podemos estar obligados a vender. Y ese es nuestro activo más fuerte, no sólo de cara a nuestros accionistas, sino también a quienes nos financian y a nuestros clientes”, sostiene su gerente general, Eduardo Bastitta, licenciado en Economía Empresarial de la Universidad Torcuato Di Tella.

En algún momento, lo que terminaría convirtiéndose en Plaza Logística era apenas una entre muy variadas opciones de inversión, que iban desde el agro hasta la minería. Finalmente, Bastitta y su socio estadounidense vislumbraron una oportunidad en el desarrollo de estos parques, un negocio muy extendido en el mundo, pero muy incipiente en la Argentina, todavía hoy. “En la mayoría de los países, cuando una empresa necesita montar un centro de distribución o una fábrica, no tiene sólo la alternativa del financiamiento bancario, sino la posibilidad de que alguien lo construya por ella y se lo alquile. Se trata de un sector bastante importante, que aporta mucho al desarrollo industrial y logístico”, explica Bastitta.

El primer desafío era la magnitud de la inversión requerida. En consecuencia, buena parte de los esfuerzos iniciales se concentraron en convencer de las bondades del proyecto a los potenciales accionistas y a entidades financieras que brindan respaldo a este tipo de emprendimientos, como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación para Inversiones Financieras en el Extranjero (OPIC, por su nombre en inglés). Tras cuatro años de gestiones, la perseverancia rindió sus frutos y, en 2010, recibieron el primer préstamo.

 

Vea el texto completo en la edición impresa.
Suscríbase.

Tamaño del texto A A A