RECURSOS RENOVABLES
El INTI calcula la huella hídrica de alimentos
Un equipo multidisciplinario del organismo trabaja en la validación de una metodología. La experiencia arrancó con el análisis de la producción de quesos.
Ese indicador permite determinar el nivel de eficiencia en el uso del agua.
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) está consolidando un equipo de trabajo formado por especialistas en diferentes temáticas para validar una metodología que permita medir la huella hídrica en la producción de alimentos. La experiencia se inicia con un análisis de la elaboración de quesos semiduros, para determinar cuánta agua insume el proceso, y se prevé extenderla a otros productos de consumo masivo en la Argentina.
El grupo de trabajo, denominado Comisión de Huella Hídrica de Productos Alimenticios (COHHAL) está integrado por centros del INTI que realizan innovación en alimentos, además de otros vinculados a temáticas afines. Se trata de los centros de Carnes, Lácteos, Agroalimentos, Cereales y Oleaginosas, Envases y Embalajes, Plásticos, Química, Electrónica, Mecánica, Diseño industrial, Ambiente, además de los ubicados en las ciudades de Concepción del Uruguay (Entre Ríos), Mar del Plata, Luján de Cuyo (Mendoza), Rafaela (Santa Fe), Villa Mercedes (San Luis), Salta y otros centros regionales con los que cuenta el INTI en todo el país.
“En el mundo se emplean dos metodologías para evaluar este indicador, la propuesta por la Water Footprint Network (WFN) y la basada en la norma ISO 14046”, dice la ingeniera Claudia Falabella, coordinadora de COHHAL. “Como no existe consenso mundial sobre cuál de ellas finalmente se impondrá, estamos explorando las particularidades de ambas para dar respuesta a demandas de la industria apenas se produzca esa definición”, destaca.
El INTI ya había incursionado en la aplicación de metodologías destinadas al cálculo de indicadores ambientales. Entre ellas, la determinación de la huella de carbono en productos (indicador que describe las emisiones de gases de efecto invernadero liberadas a la atmósfera durante el ciclo de vida de un bien, producto o servicio), y el análisis de ciclo de vida (ACV).
Los próximos pasos de la COHHAL apuntan a la cadena del maní, la producción avícola y de vinos.
La huella hídrica tiende a posicionarse como una medida de calidad de los productos y a incorporarse entre los requerimientos comerciales internacionales. “Esta estrategia, al igual que otras que impulsa el INTI en diferentes temas, tiene por fin agregar valor a la producción nacional”, enfatiza Adriana Rosso, subgerente de Ambiente del Instituto.
Publicado el 28-03-2016
Fuente: INTI / Foto: Jee Wong - SXC.
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